jueves, 22 de abril de 2010

La respuesta





Esta es la historia de un hombre que alguna vez fue mimo. Un hombre que alguna vez renunció a hablar y se convirtió en mimo. 

Una mañana un pájaro se posó en la ventana de su habitación y le preguntó la razón por la que había renunciado a hablar. El mimo se esforzó por explicarle pero tristemente advirtió que ya lo había olvidado. 

El pájaro entonces prometió volver más tarde y el mimo pasó los siguientes días y las siguientes noches intentando recordar la razón por la que había renunciado a hablar.

Un día el pájaro volvió para hacerle la misma pregunta. Para entonces el mimo ya lo había recordado: quería ser poeta. 

Entonces el mimo le contestó al pájaro, pero en lugar de palabras eran gemidos los únicos que golpeaban el silencio. Consternados ambos se dieron cuenta de que su lengua había desaparecido.

El pájaro no volvió jamás y el mimo dejó de ser mimo para volver a ser hombre y llorar.