lunes, 11 de abril de 2011

Huéspedes intestinales


Felpudo con la palabra BIENVENIDOS. Tocan la puerta con los nudillos. Nadie abre. Tocan la puerta con los nudillos. Nadie abre. Tocan la puerta con los nudillos. Nadie abre. Los nudillos sangran. Nadie abre. Tocan la puerta con los nudillos ensangrentados. Manchan la puerta de sangre. Nadie abre. Tocan la puerta con los nudillos ensangrentados, ya se alcanza a ver el hueso. La sangre escurre por la puerta. Nadie abre. Tocan la puerta con los huesos de los nudillos que ya no tienen piel. La sangre gotea sobre el felpudo. El felpudo dice BIENVENIDOS pero ellos tocan la puerta con los nudillos que ahora sangran y nadie abre. Gasto de la piel necesitado por el dolor.